la guampa bovine horns рога
Historia
Guampa, es una voz quechua que designa a las astas o cuernos del ganado vacuno, y en Paraguay, al recipiente de este material, usado para preparar el tereré.
Desde las comunidades más primitivas se viene usando el hueso y la cornamenta de animales para la elaboración de armas o utensilios de primera necesidad. Son conocidas las diversas artesanías en hueso, marfil y astas de animales logradas en el Egipto milenario. De allí se trasmite a toda Europa.
En la Edad Media estaba tan consolidado el uso del cuerno, que los artesanos que se dedicaban a ese trabajo, se les llamaba “cornuarios”, y así se diferenciaban de otros oficios.
Los conquistadores españoles trajeron estos usos y costumbres a América, donde se fueron adaptando a las culturas nativas y adquiriendo identidad propia.
Tengamos en cuenta que el ganado vacuno fue introducido en la cuenca del Río de la Plata en el siglo XVI, y en el caso de Uruguay, el alambrado de los campos se hizo en 1870, por lo cual durante tres siglos los animales cimarrones se reproducían y trasladaban libremente favorecidos por el clima y las buenas pasturas de la zona. Esta proliferación del ganado, aseguraba abundancia de guampas.
En el siglo XVII, los Guaraníes ya hacían cucharas, cajas para tabaco, peines y vasos a los que llamaban “mate”. Esto documenta la antigüedad del mate de guampa, como recipiente para tomar la infusión del mismo nombre (yerbamate picada, mojada con agua hirviendo y bebida a través de una bombilla en forma de tubo). Dicho vaso con el tiempo será sustituido por una pequeña calabaza.
Los vasos o mates de guampa se hacen con un trozo de cuerno con los extremos cortados y poniendo una tapa de madera en el extremo mayor y dejando el otro extremo como boca. También con las guampas se hacen mangos para cuchillos, fustas, etc., y las guampas grandes se usaban para llevar agua; a éstas se las llama “chifles” y se llevaban atravesadas en la espalda o colgadas del recado. La “guampa de orines” era la que llevaban los gauchos en su montura para orinar sin tener que desmontar.
Extracto de museo del gaucho:
Guampa
Aquellos españoles que llegaron detrás del ganado, a nuestro territorio, sobre fines del siglo XVII y comienzos del XVIII, sabían muy bien de la naturalista utilización del asta o cuerno para fabricar una serie de implementos del repertorio material (ergología) de bienes propios del pueblo español: yesqueros; recipientes para pólvora; depósitos para vino, aceite, leche o miel; instrumentos sonoros hechos con cuernos de diferentes tipos, para el pastoreo, la caza y aun para hacer música (aerófonos). La monumental cornamenta de nuestros vacunos cimarrones, habría de favorecer a toda la industria que les utilizara como materia prima.
Lo primero fue, naturalmente, los chifles (vocablo local derivado del portugués, chifre, que significa cuerno). Es decir, esas enormes cantimploras o recipientes para líquidos, formados por el cuerno enterizo, con su natural oquedad, cuyo extremo inferior o base se cierra, más o menos herméticamente, con un redondel de madera, forrado con otro de guampa, y el superior, o punta, que se ha mochado y abierto, con otro tapón, igualmente de madera o guampa, de quita y pon, pues este extremo es la boca del chifle. Estos chifles en su forma más elemental no tenían más decoración que las tonalidades y vetas del material pulido, pero luego se le agregaron hermosos motivos decorativos por tallado o burilado, así como aplicaciones de plata (fondo, viro- las, tapón, o hasta la cadena para colgarlo).
También de guampa se hicieron unas especies de vasos, cortones, muy de uso por los troperos, llamados sobre todo en la banda occidental y las provincias de "arriba", "chambaos", adornados en forma semejante, aunque en relación a su tamaño, a la de los chifles.
Igualmente se hicieron mates, es decir recipientes para la infusión, de cuerno, también con motivos grabados y burilados.
Para mangos de cuchillos y facones, para confeccionar las bolas de las boleadoras (moldeando la guampa, rellenándola de plomo y poniéndole casquillos de plata), e incluso para adornar los aperos o recados del caballo, en lugar de la plata (pasadores, plaquetas, aplicaciones), se usó la guampa, materia prima tan común antaño como el propio cuero.
Chifles y Vasos
El chifle y el vaso fueron de uso común entre vaqueros y gauchos, troperos, bomberos y carreros, en nuestro campo, que los llevaban, de a caballo, sobre sí o en el recado.
El chifle, según ya indicamos, es un cuerno vacuno de buen tamaño, con su fondo y tapón, que servía para transportar líquidos, a veces agua, generalmente aguardiente en cualquiera de las formas conocidas y comunes en nuestra campaña: caña o ginebra.
El vaso, en cambio, como lo indica su nombre, es un recipiente menor, también hecho de guampa, usado para tomar agua: mediante una soga de tiento se le echaba, sin bajarse del caballo, al centro de una corriente de agua, a efectos de obtenerla fresca y pura, lo que no es posible si se la recoge de las orillas.
Tanto los chifles como los vasos o chambaos se adornaron con virolas y soajes de plata, en muchos casos muy labrados y cincelados, así como sus tapones se hicieron enteramente de plata y de plata se cubrió el fondo. Se llegaron a hacer vasos todos de plata batida.
Normalmente unos y otros se adornaron con relieves y grabados hechos en la propia guampa, hermosos burilados, algunos de alto contenido simbólico o anecdótico (esto más notable aún que en los mates), a veces divisas partidarias, el escudo nacional, episodios de la épica local, escenas campesinas, animales, etc., algunos de ellos de auténtica belleza artesanal.
Museo del Gaucho
Dirección: Palacio Heber Jackson - 18 de Julio 998
Tel: 2900 8764 / Fax: 2901 5686
Horarios: Lunes a Viernes de 10:00 a 17:00 hs